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31 enero 2016

Contabilidad inicial

El Capricho y Barajas, Madrid
29 y 30 de enero de 2016

Me voy de viaje por unas semanas y, bueno, desde el primer momento empiezo gestionando mal algunos puntos de karma. En concreto 5 y una de las razones es que no pagué el coste extra para poder elegir asiento en el tren. Arriesgué y perdí. A ver, tenía un tercio de probabilidades de que me tocara el asiento individual y el dado de tres caras no me hizo caso, por mucho que lo calenté contra el tablero para que saliera el resultado que yo quería. Sí, hablo de una técnica ancestral de Algezares que pocos dominan y que algunos usan de forma ilegal y efectiva para ganar jugando al parchís. Lo que decía, gané esos puntos (que en definitiva malgasté) porque al llegar el tren descubrí que me había tocado en un sitio de dos personas que apenas tenía ventana (-1 puntos), pero al salir de la estación me di cuenta de que había un sitio individual libre a mi derecha y que la ventana lo abarcaba por completo. Pregunté al revisor y gané 6 puntos.

Apunte 1: mi saldo de karma es de + 5 puntos.

*
La gente tiene que verme mala cara porque me dejan lo sitios en el metro, a pesar de que no parece que necesite sentarme por enfermedad, por estar tullida por alguna guerra o por estar embarazada. En este caso, personas de mi misma edad, que normalmente no reparan en ese tipo de cosas, me ofrecen mejores posiciones con sujetabrazos al alcance de mi mano. Llevo una maleta de 20,5 kg, una mochila de más de 7, seguro, y una bolsa de tela blanca con comida. El chaquetón lo llevo abierto porque estoy ya preparada para un invierno del tipo moscovita, como poco. Tengo calor. Tengo un brazo (el derecho) ya dolorido. Tengo una hora y debo hacer un trasbordo de la línea 10 a la 5. El primer metro se me escapó en la cara y el segundo también, nada importante.

Bueno, bueno, que se me olvidaba hablar de la situación de las magnificas escaleras (no me refiero a las mecánicas) del metro de Madrid. En una de ellas, tuve un encontronazo con una señora mayor justo cuando me faltaban unos 5 peldaños para llegar al final. La señora me veía bajar (no era muy difícil verme) y decidió que yo mi último tramo lo tenía que hacer por el centro, es decir, sin poder agarrarme a nada y para que me matase y para estar ella viéndolo en primera fila. Continúo. La mujer se aferró a la baranda y me vi obligada a frenar para que mi maleta y mi cuerpo no toparan con el suyo y tuve que arriesgar mi vida. No exagero. Tampoco sé qué le pasaría a ella al final, pero espero que llegara a la cima de las escaleras sana y también deseo que no se tropezara con alguien y tuviera que ir por el centro de la escalera sin poder tener alguna sujeción. Cosas del destino.

Apunte 2:
· Resto 4 puntos de karma en concepto de la carga de maletas y la perdida de dos metros en mi cara (lo de la señora mayor no lo tengo en cuenta, aunque debería).
· Sumo 5 puntos de karma en concepto de ayuda de desconocidos.

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Unos días antes de salir de viaje investigo para reservar una habitación doble  en un hotel. Antes que nada, quiero hacer especial hincapié en por qué, por lo general, si vas solo a un hotel, en la habitación encuentras dos camas y te cobran lo mismo que si van dos personas. Tema aparte, me merecía la pena un hotel que tuviera enlace con el aeropuerto. Es decir, me interesaba contar con servicio gratuito hasta la terminal 1 y me interesaba también que no estuviera muy lejos. Buscando, buscando, encontré un hotel por 30€ menos que uno que me recomendaron que estaba por la zona. Perfecto: no estaba mal, pero sí que tampoco era perfecto1. Me explico: la conexión WiFi debía funcionar bien, de hecho al principio funcionó bien durante una hora, pero después, no había manera de volver a conectar. Y lo de bajar a recepción otra vez a preguntar no lo contemplaba. Otra cosa, la calefacción no funcionaba y el aire acondicionado sí: muy coherente en invierno. En fin, no voy a seguir hablando positivamente del personal porque tampoco me propongo aquí hacer una crítica para Tripadvisor de este hotel, pero vamos, ya que me pongo, le doy 2 estrellas sobre 5.

Apunte 3:
·Sumo 1 punto de karma por encontrar la oferta, aunque me esforcé por encontrarla lo justo.
·Resto 3 puntos por las consecuencias de usar una habitación doble siendo solo una persona.

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Llego al aeropuerto con tiempo y en esta secuencia hay poco que destacar. ¿Una hora y veinte minutos de retraso me aportaría 1,2 puntos? Supongamos que sí, pero está claro que la compañía se redimió con botellas de agua, bolsas de patatas fritas, chocolate y libros para colorear y hacer crucigramas (de los cuales por poco cojo uno) para amenizar la espera. Está claro, que sí que a mí se me gana por la comida y más si es gratis.

Apunte 4:
·Resto 1,2 puntos de karma en concepto de retraso del avión.
·Sumo 10 puntos de karma en concepto de comida gratis, que probablemente iría incluida en el coste de mi billete, pero da igual.

***

¿Las horas que técnicamente he ganado (un total de 6) computan como puntos de positivos? ¿Las que he perdido madrugando suman en esfuerzo?

Apunte 5:
·Por determinar.


1: Utilizo esta palabra dos veces porque, como puede intuirse, de "perfecto" no tenía mucho, como máximo podría ser "mediocre".

10 enero 2016

Remover los componentes

Me regalaron una batidora de vaso. Era muy potente, costaba unos 400$ y tenía una potencia de 1500 vatios; lo que viene siendo unos dos caballos. Tenía, supuestamente, unas aspas que eran capaz de hacer sopa con mi alma. Destruirla y calentarla, también. Era una máquina en la que echabas cebolla, tomate con aliños y salía todo bien machacado. De esa manera, no hacía falta morder y casi tampoco ni abrir la boca. Producía un líquido tal que se podía sorber con una pajilla. Otra opción era introducir el contenido en una jeringa y que alguien apretara el émbolo por ti. 

Me regalaron un aparato robusto para no desgastar mis muelas, para estar a la moda, para experimentar con alimentos y combinarlos. Conseguí tener un arma más en la cocina. Esa zona se convirtió en la más segura de la casa, aunque comprobé que las entrañas no las trituraba.